Francis, a través de los años, he tenido muchos momentos de reconocer o notar que el yo (self) existe sólo en pensamientos o en “conclusiones” sobre modelos de sensaciones o emociones. Pero hay todavía una creencia de que un sentido de “identidad” con la Consciencia es la prueba final de que un cambio, o iluminación, ha tenido lugar. Puedo reconocer fácilmente cuando hay una identificación con un “yo”. Pero todavía creo que cuando el sentido de ser separado se desmorone, habrá un “reconocimiento” de la unidad, o un “ conocer’ o una “identificación” con la unidad en lugar de con el yo. ¿Puedes confirmar o responder a esto? Gracias.
Estimada Darcy,
El sentido de y la creencia en la separación se desmoronan poco a poco, como resultado de la investigación sobre la naturaleza de la consciencia, conduciéndonos al reconocimiento de nuestra eternidad.
No nos podemos identificar con lo que somos, porque ya lo somos, pero nos podemos des-identificar de lo que no somos. El momento en el que lo-que-no-somos es totalmente acogido, es visto tal como lo que es, una mera apariencia en la infinita Presencia que es nuestro verdadero Ser. ¿Cómo puedes reconocer que el objeto al que llamas “yo” no eres tú sin conocer en cierto sentido lo que eres? Serías como alguien que afirmase al mismo tiempo que un músico ha tocado una nota falsa pero que él no sabe la nota correcta. Si eso fuera verdad, ¿cómo podría saber que el músico había tocado la nota errónea? Puede creer sinceramente que no sabe cual es la nota correcta, y puede ciertamente ser incapaz de cantarla, pero eso no implica que no la conozca.
La realización del ser es el redescubrimiento de este “conocer” de la Presencia infinita como el trasfondo de nuestras percepciones y actividades. Es un proceso de dos etapas:
Vemos lo que no somos (discriminación usando este conocer, razonamiento superior, sensaciones superiores). Es como aprender a cantar la nota correcta al practicar para actuar en directo.
Vemos lo que somos en su total libertad e inmortalidad (vislumbre de nuestra verdadera naturaleza, puro conocimiento).
Ahora mi vida es la canción que canto. El título es: Aleluya
Afectuosamente,
Francis
Traducido por Carmen Areitio
Index