Estimado Francis, hace tres años leí un libro de Jean Klein y me arrebató un amor por la verdad compartida. He estado leyendo tus respuestas y viendo tus videos. Estoy agradecido por la belleza de tus respuestas, que suenan a verdad y me llevan a un espacio impersonal. Tengo 26 años. Mi camino espiritual sincero empezó hace cinco años y me ha llevado a través de muchos intereses. En este momento me siento desilusionado con todos ellos, excepto tal vez estas enseñanzas. El párrafo que sigue puede parecer muy sombrío y lamentable pero describe dónde estoy. En los dos últimos años siento que estoy perdiendo el entusiasmo por todo. De forma natural solía sentirme inspirado en ayudar a la gente, cambiar el mundo, hacer bellas películas (soy cineasta de profesión). A medida que las enseñanzas comenzaron a asentarse, comencé a perder interés en estas pasiones. Nunca como ahora he estado tan desinteresado en la vida. Mis esfuerzos de encajar en mis relaciones con las personas queridas, amigos, y familia, son como mucho mediocres. Mi profesión de cineasta, que tenía bastante éxito, ha llegado a ser solo un simple medio de subsistencia. No es que no me guste, pero ya no me apasiona. Sin embargo ¡no tengo nada con que reemplazarla! (suena horrible…) Y tristemente siento que estoy perdiendo la ilusión de ayudar a la gente activamente, que era una pasión de toda mi vida. Ninguno de estos intereses, de alcanzar cosas, tiene ya sentido. Lo único que me inspira realmente - la única pasión segura que tengo - es la clara comprensión compartida por ti, Jean Klein y muchos otros. Me preocupa que todo mi entusiasmo por las enseñanzas haya desequilibrado mi mente - condicionándola de una manera demasiado crítica y antisocial. ¿Tal vez esto pasará a medida que la verdad surja de forma natural? Desde el punto de vista convencional estoy perdiendo todo mi valor para la sociedad - y estoy preocupado, porque siempre he sido impulsado por mis intereses - y sin ninguno, ¿donde iré? Ya no me siento realmente inspirado por mucho de lo que se dice en los círculos sociales y me siento un poco como un carácter melancólico, ya que aparte de unas pocas pequeñas tangentes más, básicamente sólo estoy interesado en estas enseñanzas. Jaja! Tengo que reírme de cómo suena todo esto, sin embargo es cierto. Incluso en mis mejores momentos, mi interés natural no llega muy lejos. Me preocupa que tal vez acabe sentado por ahí todo el tiempo, sin hacer nada, pensando en verdades sin sentido. Y debo admitir, que tengo miedo de que la gente que me rodea no me entienda - siento que perderé la conexión con mi novia y cualquier otra persona que “tenga una vida”. Ya he perdido muchas conexiones. He leído acerca de una “noche oscura del alma” en las enseñanzas… Espero que puedas verter algo de luz sobre lo que estoy pasando y ofrecerme cualquier consejo que te parezca. Con amor y gratitud, Roger
Estimado Roger,
Los síntomas que estas describiendo son absolutamente normales. El nombre de la enfermedad es Amor. No hay una cura conocida, y tasa de supervivencia del ego a los diez años es baja. La buena noticia es que después de cierto tiempo los síntomas pueden evolucionar hacia un estado de paz, creatividad, entusiasmo y felicidad. En la mayoría de los casos, para que esta evolución tenga lugar, se requiere la asistencia de un médico especializado (generalmente llamado maestro espiritual, aunque el nombre técnico completo es karana gurú). En todos los casos, la desaparición del cuerpo físico en el momento de la muerte pone fin a la enfermedad.
Con afecto,
Francis
Traducido por Carmen Areitio
Index